“Con una economía en desaceleración, escándalos de corrupción y un creciente descontento ciudadano, los partidos opositores capitalizan el descontento popular mientras el PRM lucha por mantener la unidad interna."
Santiago, 25/09/2025.- La administración del presidente Luis Abinader enfrenta una creciente presión política y social debido a una economía en desaceleración, escándalos de corrupción y un descontento ciudadano que ha alcanzado niveles históricos. Mientras la oposición se fortalece, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) intenta mantener la cohesión interna ante la perspectiva de un nuevo ciclo electoral sin la candidatura del actual mandatario.
Desde que asumió el poder en agosto de 2020, el presidente Luis Abinader prometió erradicar la corrupción, impulsar el crecimiento económico inclusivo y resolver los problemas estructurales del país. Sin embargo, cinco años después, en septiembre de 2025, el panorama es desolador. La economía muestra signos de agotamiento, con sectores clave como la construcción, la manufactura y el agropecuario en desaceleración. Según datos del Banco Central, el Producto Interno Bruto (PIB) creció solo un 2.9% en julio de 2025, lejos del 5% acostumbrado en años anteriores. Además, la deuda externa ha alcanzado los 27,407.4 millones de dólares, la cifra más alta en la historia del país .
Paralelamente, varios escándalos de corrupción han sacudido la administración. El caso más reciente involucra al Seguro Nacional de Salud (Senasa), donde se detectaron irregularidades millonarias. El presidente Abinader aseguró que en su gobierno no permitirá impunidad de ningún tipo y remitió el informe de las irregularidades a la procuradora general, Yeni Berenice Reynoso .
Ante este escenario, la oposición ha intensificado sus críticas y propuestas. El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y Fuerza del Pueblo (FP) convocan a ruedas de prensa semanales para denunciar las faltas del gobierno y presentar alternativas. El expresidente Danilo Medina ha señalado que la actual administración no ha logrado restablecer el sistema 911, reponer el sistema energético, construir más aulas y hospitales, ni crear más empleos .
Mientras tanto, el PRM enfrenta desafíos internos. Con un presidente que no será candidato en las próximas elecciones, varios aspirantes a la candidatura presidencial luchan por posicionarse, lo que ha generado tensiones dentro del partido.
La situación actual coloca al país en una encrucijada política y económica. La oposición se presenta como una alternativa ante el desgaste del gobierno, mientras que el PRM busca mantener la unidad interna para enfrentar los retos venideros. El futuro político de la República Dominicana dependerá de cómo se gestionen estos desafíos en los próximos meses.
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